domingo, 11 de marzo de 2012

LA VIDA EN NEGRO I



Debo decir que cuando uno es un niño, ve hacía el futuro y se imagina como quiere ser, no se si a todos les pasó eso, pero a mí sí, cuando era niño me veía con un futuro, si no como un millonario, si como alguien que tenia la vida al parecer resuelta (en mis sueños) es decir: con un buen trabajo, una casa de buen ver, uno o dos carros también de buen ver, y claro, una esposa de muy buen ver, que me quiera mucho, y sí, tal ves no era rico en mis sueños pero pues al menos tenía una vida holgada; hoy he recordado aquellos sueños y me he descubierto en ese plano, aunque con muchas o muchísimas cosas menos de las que soñé.

Es decir, en cierta forma tengo algo de lo que soñe pero por mitad, es decir, sí tengo parte de lo que soñé, pero no se acerca ni al cincuenta porciento de lo que soñé, me pregunto si a todos los que conozco les habrá pasado lo mismo, en fín, esta es mi vida.

Cuando uno es un niño,  uno no tiene la responsabilidad de pensar en su futuro, y no la tiene simplemente porque uno la da por hecho, uno se imagina que en un futuro va a seguir teniendo la misma vida que uno tiene cuando es un niño, con las mismas carencias tal vez, pero con mejor futuro (o viceverza), pero lo que uno nunca se imagina, es lo que es  realmente vivir, y vivir de a deveras.

Es decir uno tiene tantas espectativas cuando es un niño, el futuro lo ve lejano, el pasado demasiado presente, y el hoy demasiado eterno como para que acabe. Cuando se es niño, uno lo ve así, o al menos unos lo vimos así, pero no todo es como lo pintan nuestros sueños.

Año con año uno va experimentando un incremento de responsabillidades, que en los primeros años uno no los nota, porque no son importantes, pero a medida que pasan los años se van incrementando, y derrepente un día algo hace cambiar todo lo que uno conoce hasta ese momento en responsabilidad, ese primer día uno aprende que todo se puede desmoronar con el más minimo error, ese día uno quiere regresar a los años del pasado, del pasado inmediato de un día antes, y que todo vuelva a ser como antes, sin la responsabilidad, (responsabilidades que si hoy a estas alturas las vemos nos dan risa) pero que existen o existieron.